Este es mi plan para ser multimillonario rápido

Hola a todos!

Probablemente estés pensando: “Otro gurú vende humo que te ofrece el camino rápido y fácil para ser millonario”. Ojo, que diga rápido, no quiere decir que sea fácil, por ahí no va la discusión. Por más que el título se preste para pensar eso, los invito a leer el contenido y espero que esos prejuicios se caigan rápidamente.

El artículo cuenta con algunos aprendizajes que leí del libro “La vía rápida del millonario” de MJ DeMarco que, por cierto, recomiendo leer si estás pensando emprender un negocio, pero tienes mucho miedo de perder el confort de tu trabajo fijo.

¿Qué vamos a ver hoy?

  1. Perdiendo el miedo de hablar del dinero
  2. Las 3 vías para ser millonario(a)
  3. Regla #1: Ten el control
  4. Regla #2: Desvincula el tiempo de la riqueza
  5. Regla #3: Haz algo escalable
  6. Regla #4: Olvídate del dinero
  7. Conclusión

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Perdiendo el miedo de hablar del dinero

Me parece incongruente cómo hablar de dinero es un tabú para muchas personas cuando es una de las principales herramientas para alcanzar nuestros objetivos y, al mismo tiempo, está vinculada con nuestros más grandes problemas. Considero relevante empezar a hablar de dinero con total naturalidad.

“El dinero está en todas partes, nos afecta a todos nosotros y confunde a la mayoría de nosotros” (Morgan Housel, The Psichology of Money)

Que hables del dinero con naturalidad no significa que seas una persona avara, superficial o fría. Es más, para hablar sin miedo del dinero es clave haberle dado su justo lugar en la cadena de prioridades. Claramente el “ser” es mucho más que el “tener”. Es más importante ser una persona de valores y principios que tener casas, carros y lujos. Que yo quiera ser multimillonario no significa que sea una persona sin corazón ni que tenga mi escala de prioridades alterada.

Incluso me atrevo a decir que puedes conocer mucho a una persona por cómo se expresa del dinero.

Las 3 vías para ser millonario(a)

El libro de MJ DeMarco categoriza 3 vías principales: el arcén (margen lateral de una carretera), la vía lenta y la vía rápida. No cubriré lo que es el arcén por temas de tiempo y porque lo más probable es que, si estás leyendo este artículo, te ubiques entre la vía lenta y la rápida. Pero para que no se quedan con las ganas, esta ruta se caracteriza por priorizar el corto plazo sobre el largo. (Los invito a leer el libro)

Lo que caracteriza a una persona de la vía lenta es que sacrifica el día de hoy con la esperanza de vivir mejor y más libre en un futuro. Vendría a ser la antítesis del arcén y, por ese motivo, este camino rara vez es cuestionado.

La fórmula para ser ricos de estas personas lo basan en 2 factores primordiales:

Riqueza = Empleo o Valor intrínseco + el interés compuesto.

Como bien saben, después de darme cuenta que mi vocación no era la del sacerdocio, después de 5 años, tuve que empezar relativamente de cero mi carrera universitaria para poder ser “empleable”. Empezaba a estudiar una carrera profesional con 23 años, mientras mis amigos y enamorada ya estaban graduados y trabajando.

En ese momento, yo pensé: “Si sigo por la vía lenta (que en ese momento no la conocía así), me podría demorar más de 10 años en poder ser, por lo menos, gerente de una corporación”. Cuando me faltaban 2 años para terminar la universidad, estaba como empleado en una agencia y mi sueldo era de S/1,500 mensuales. Además, los fines de semana trabajaba como valet parking y seguridad para ganarme entre S/200 y S/300 extra.

Imaginemos que hubiera seguido por el camino usual de crecimiento laboral:

2015: Sueldo de S/1,500 (Tenía 25 años)

2018: Acabar la universidad y aumento a S/2,500 (Tenía 28 años)

Al año en una empresa te suben entre 3% y 8% de sueldo. Pongámonos positivos y supongamos que me aumentan todos los años el porcentaje más alto. A mis 40 años, tendría un sueldo aproximado de S/6,295.42 al mes.

Ahora, imaginemos que tengo un excelente desempeño y me dan más responsabilidades en el trabajo que me permite dar saltos profesionales interesantes. A los 40, podría ser un gerente comercial de una gran empresa y gano entre S/25,000 a S/30,000 mensuales. Si ahorras el 50% de ese sueldo todos los meses, tendrían que pasar 22 años para que tengas $1,000,000.

Por otro lado, la vía lenta cree en el interés compuesto también y la regla es que un porcentaje (10% normalmente) de tu sueldo lo inviertas en la bolsa de valores para que en un futuro veas tu dinero con creces. Sin embargo, ese resultado se dará si eres paciente y eres un inversionista de largo plazo. La magia del interés compuesto es real, pero podrás ver los frutos a partir de tus 50s o 60s. ¿Por qué esperar tanto tiempo para disfrutar de la libertad financiera? Por si acaso yo sí creo en la inversión de largo plazo. De hecho, yo uso esa técnica de invertir el 10% de mi sueldo todos los meses. La única diferencia es que no considero que me voy a hacer millonario rápidamente por hacerlo.

No estoy juzgando tampoco a las personas que escogen esta vía. Simplemente, he sido descriptivo con lo que yo pensaba en ese momento cuando estaba en la universidad y cómo iba a este ser un camino de largo aliento para lograr lo que tenía en mente para mi vida.

Ahora entramos a explicar la vía rápida. Explicaré las reglas que yo vengo usando y pondré ejemplos de cómo la estoy aplicando convirtiéndose en mi plan para ser millonario rápido.

Regla #1: Ten el control

Algo característico de la vía lenta es que las personas dependen de un tercero. Dependen de alguien que te dé trabajo y dependen de los movimientos que hace la bolsa de valores a favor de nuestras finanzas personales.

Para ser millonario rápido tienes que tener el control, así de simple. Y para tener el control, necesitas tener algo propio. Ahora, el camino de emprender no es nada fácil. Mientras unos trabajan 8 horas los días de semana, nosotros trabajamos 12 o más y a eso agrégale los fines de semana. Además, el mercado mismo suele ser bastante duro con nosotros. No siempre somos capaces de encontrar un problema y solucionarlo con el modelo de negocios adecuado. Es un camino de mucho aprendizaje y, como ya dije, es cuesta arriba.

Si decidiste tener el control de tu propio negocio, existen 2 fórmulas para poder hacerte multimillonario siendo emprendedor:

  • Beneficio neto = Unidades vendidas * Beneficio por unidad
  • Valor de activos = Beneficio neto * multiplicador del sector de actividad

Para ponerles un ejemplo de cómo aplico esta regla, en Kambista, las unidades vendidas vendrían a ser el número de transacciones y el beneficio por unidad es la ganancia neta por operación.

Hace algunos meses hemos lanzado nuestro sistema de beneficios que le permite a nuestros usuarios tener descuentos en distintos comercios por el solo hecho de cambiar dinero. En la medida que más transacciones haga nuestro cliente, mayores descuentos. Esta estrategia hizo que la recurrencia de nuestros clientes crezca de 40% a 60% mensual, impactando directamente en mi número de operaciones y, por ende, en mi beneficio neto. Así cómo estas estrategias, hay muchas más para aumentar las unidades vendidas: puedes incrementar las visitas a tu web, mejorar la tasa de conversión en cada parte del recorrido de tu cliente, incrementar el número de referidos, etc.

Por el lado de la ganancia neta por operación, esta aumenta en la medida que más dinero de mis clientes muevo, ya que, en esos casos, al tener yo mismo el flujo de dólares y soles, puedo darle un mejor precio a mi cliente sin necesidad de ir a mayoristas (bancos, sociedades de bolsa, financieras) y me saquen una tajada de mi ganancia. A esto se le llama economías de escala. Mientras más cantidad de clientes tenga, más dólares y soles tendré en mi cuenta y, por ende, más posibilidad de hacer “match” entre mis propios clientes, aumentando mis márgenes de ganancia.

¿Cuánto ganas por cada producto/servicio que vendes? ¿Hay margen para subir tu precio agregando algo de valor extra o hacer algún tipo de iniciativa de venta cruzada? ¿Hay espacio para reducir tus costos y ser más eficiente?

La segunda fórmula tiene que ver con el “exit” o venta de tu empresa. El beneficio neto anual vendrían a ser las utilidades generadas por tu empresa y el multiplicador del sector de actividad significa el precio que te pagarían por comprar el total de tu empresa. En la medida que más beneficio neto generes, más valdrá tu empresa. Para cada sector, normalmente hay un multiplicador de las utilidades. Si tú tienes una empresa que genera S/100,000 de utilidad neta y viene creciendo 5% anual. ¿Cuánto pagarían por tu empresa? Definitivamente más de S/100,000. Ahí se aplica el multiplicador del sector para saber cuánto realmente vale la empresa. Dependiendo del rubro, esa empresa puede valer 3x, 5x, 10x o hasta 20x su beneficio neto. Como este factor depende directamente del beneficio neto, es también controlable. Mi plan con Kambista es hacerlo crecer lo suficiente para: o incrementar las utilidades como socio todos los años o venderla a un excelente precio a algún postor con el que nos complementemos.

Para poder guiarte de cuál es el multiplicador de tu sector, puedes ver las empresas que cotizan en bolsa de tu rubro y hacer un benchmark de cuánto las está valorizando el mercado sobre sus utilidades.

Regla #2: Desvincula el tiempo de la riqueza

A veces, creemos que tenemos tiempo de sobra, cuando en verdad nadie tiene las horas contadas. Puede sonar duro pero es la verdad.

“Memento mori” – “Recuerda que morirás”

Se repetían los monjes para recordarse que en cualquier momento la vida se va y tenían que concentrarse en lo esencial. Si llevamos este aprendizaje a nuestro tema, ten siempre presente que si alquilas cada minuto de tu tiempo por dinero será muy complicado llegar a ser millonario (salvo que cada hora cobres grandes sumas de dinero).

“En lugar de intercambiar tu tiempo por dinero, intercámbialo por un sistema de negocios: convierte la producción de riqueza en un proceso industrial.”

Cada vez que le pedía propina a mi mamá, me decía: “¿Qué crees que el dinero crece en los árboles?” Pues bien, ahora lo creo. El dinero sí crece en árboles. Estos vendrían a ser los sistemas empresariales que sobreviven sin necesidad de que tú le dediques tiempo. Sí, requiere cuidarlos de forma periódica, pero sobreviven por sí mismos.

¿Cuáles son estos sistemas?

  1. Sistemas de alquiler: Tener un inmueble y alquilarlo es un sistema bastante conocido y sigue funcionando pese a que los años pasen. El 95% de estos ingresos son pasivos normalmente y, no solamente es un sistema que te da ingresos recurrentes, sino que es un activo que se va valorizando en el tiempo. En este punto, no necesariamente tiene que ser un bien inmueble, también pueden ser pagos de regalías, licencias o concesiones.
  1. Sistemas tecnológicos: Si eres capaz de hacer un software que responda a una necesidad específica, el trabajo ya está hecho. Puedes vender uno o 10,000 habiendo construido algo una sola vez. Por ejemplo, Pocket es una plataforma que te permite guardar los artículos que más te gusten en un solo lugar y ahí mismo poder subrayar las ideas que más quieras recordar. Su modelo de negocio es una suscripción de S/144.99 al año. Así como yo pagué, pueden pagar muchas personas más. Efectivamente, tiene que haber un equipo detrás y cierto mantenimiento del software, pero no se compara con el potencial escalable que tiene.
  2. Sistemas de contenidos: Los contenidos son activos que puedes vender una y otra vez y, con cada venta, el coste en tiempo disminuye, mientras que hay un retorno mayor por hora invertida. Por ejemplo, imagínate que hayas creado un curso pre-grabado online y lo estás vendiendo a $200. Invertiste en el curso unas 112 horas de trabajo. En la medida que más compradores tengas, el valor de tu hora se irá incrementando sin que tú hagas mucho.
  3. Sistemas de distribución: Esta es una estructura que te permite llevar rápidamente algún producto o servicio a una comunidad de personas. Por ejemplo, mis canales en redes sociales y este blog me permiten llegar a muchas personas creando una sola vez. Esto no solo es eficiente con mi propio contenido sino con el contenido de otras marcas (publicidad)
  4. Sistemas de recursos humanos: El que hayas podido delegar el trabajo que, al comienzo, era 100% manual, es un sistema que te permitirá hacer dinero mientras duermes. Sin embargo, este sistema es de los más caros y complicados de llevar. En el caso de Kambista, cuando empezábamos, hacíamos manualmente las operaciones de cambio. Hoy, gracias a la mezcla de tecnología y recursos humanos, tenemos un proceso que funciona y que no depende de nuestro tiempo necesariamente.

Cuando estés creando un negocio, pregúntate lo siguiente:

  • ¿Se puede automatizar este negocio para que funcione sin necesidad que esté yo presente?
  • ¿Tengo márgenes lo suficientemente amplios para delegar y contratar personal?
  • ¿Cómo puedo hacer que este negocio funcione sin que deba dedicarle mi tiempo?

Regla #3: Haz algo Escalable

“Ten un impacto sobre millones de vidas y ganarás millones”

No deja de sorprender ver cómo muchos creadores de contenidos han sabido impactar a tantas personas y sobre todo han podido monetizar ese alcance.

Para hacer algo realmente escalable debes aplicar una suma muy sencilla: Alcance + magnitud. El primer factor es la cantidad de personas que puedes llegar y el segundo factor significa el precio de ese artículo o servicio. La capacidad de escalabilidad vendría a hacer el incremento de cualquiera de los dos factores. Vender un ebook de $1 a un millón de personas da el mismo resultado que vender un software de $3,500 a 286 clientes.

Regla #4: Olvídate del dinero

Recuerda siempre que el dinero es el resultado de haber aportado valor, no es un fin en sí mismo. No te enfoques en ganar dinero, sino en satisfacer necesidades. Y para hacer eso, debes dejar de pensar en lo que tú puedas querer o tener. Piensa más bien de manera generosa y triunfarás. En la medida que más valor crees, más dinero tendrás. La letra pequeña de esto es que el orden de los factores sí altera el resultado.

Conclusión

Por más que no esté de acuerdo con algunas enseñanzas del libro, como por ejemplo, el autor cree que “el pobre es pobre porque quiere” reduciendo la importancia de las circunstancias en la que nace y se desarrolla cada persona. Más allá de algunos argumentos insuficientes, he podido rescatar algunas ideas que han hecho eco muy profundo en mí y en lo que estoy viviendo como persona y profesional

Algo importante a resaltar es que ser millonario rápido no significa que sea de la noche a la mañana. Ya voy aproximadamente 5 años de haber emprendido Kambista y ya estamos encaminados a facturar este año más de 8 cifras y sigo ideando cosas y optimizando la fórmula de unidades vendidas * beneficio neto. Por otro lado, tengo mi canal de contenidos de negocios que es una fuente de ingresos importante en publicidad y conferencias (sistema de distribución). He invertido en 3 startups en etapa temprana (FlipTiendada y Kanoa) y tengo pensado lanzar un libro este año (sistema de contenidos). Considero que, al día de hoy, tengo los árboles que mi mamá decía que no existían y que vienen creciendo a un ritmo excelente.

Espero que estas reglas de la vía rápida te sirvan para motivarte, cuestionarte y visualizar hacia dónde estás avanzando pero, sobretodo, con qué velocidad.

Gracias por leer Hablemos de negocios 🚀. Si te gustó, te invito a compartirlo ☺️

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